El presidente de Chile se ve obligado a dar marcha atrás con la "nueva normalidad", luego de que se detectaran 2.660 nuevos contagios en las últimas 24 horas.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció que Santiago y gran parte de la Región Metropolitana volverán a una cuarentena dura desde el viernes, tras una disparada de casos que dejó en evidencia el fracaso de su estrategia de nueva normalidad.
La novedad fue anunciada por el ministro de Salud chileno, Jaime Mañalich, tras a dar a conocer que en las últimas 24 horas se registraron 2.660 nuevos contagios de coronavirus, lo que representa un nuevo récord y un salto del 60 por ciento de los nuevos positivos. De esta forma Chile llega a los 34.381 infectados, con 347 muertos, luego de sumarse 12 durante la última jornada.
La disparada de casos coincide con la reapertura ordenada hace dos semanas por Piñera, que fue muy cuestionada por amplios sectores políticos y del ámbito médico, donde pedían seguir el ejemplo de cuarentena dura de Argentina.
Jaime Mañalich. ministro de Salud chileno |
El paso en falso de Chile sirve como señal de advertencia para Argentina, que en el mismo momento avanza hacia la misma flexibilización del confinamiento obligatorio y comienza a verse un aumento importante de la circulación en el área metropolitana.
También puede tenerse en cuenta el caso de San Pablo, la región más afectada de Brasil, donde el gobernador Doria se mostró muy preocupado por el relajamiento de la cuarentena, alentado por Bolsonazi.
El crecimiento de casos de los últimos días dejó el sistema sanitario al borde del colapso, con el 87 por ciento de las camas de terapia intensiva ocupadas. Ante esto, Mañalich dijo que se ven obligados a aplicar medidas "extremadamente duras".
"El mes de mayo está siendo muy duro con nuestro país y debemos tomar acciones adecuadas en el momento oportuno para poder contener esta enfermedad", anunció.
Acceder al tuit |
Eso implica la cuarentena total a partir del viernes a las 22 horas de 38 comunas de la Región Metropolitana (incluidas las 32 de Santiago), lo que implica que un 73% de la región estará en confinamiento. Más del 70 por ciento de los casos se da en la capital y alrededores. También será obligatoria la cuarentena en las ciudades de Iquique y Alto Hospicio.
"Asimismo alrededor de este gran anillo donde viven prácticamente 8 millones de personas, se va a imponer una aduana sanitaria para limitar las salidas que no tienen que ver con aprovisionamiento de comida y trabajo desde las comunas en cuarentena hacia otras regiones", explicó Mañalich, que está en el centro de las críticas por el manejo de las cifras.
El alcalde de Santiago, Felipe Alessandrini, perteneciente a un sector moderado de la coalición que respalda a Piñera, fue crítico de la flexibilización de la cuarentena y también de la estrategia previa de tener regiones abiertas y otras cerradas.
"Hubo cierta laxitud, cierto relajo y triunfalismo y tuvimos que retroceder, porque la autoridad sanitaria decretó cuarentena progresivas y dinámicas, que parte del Gran Santiago se liberaba, otras se mantenían en cuarentena y eso generó que las personas se relajarán", contó Alessandri en declaraciones radiales. "Estamos resistiendo, está complejo. Han sido meses complejos y todavía no vemos un horizonte claro", graficó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario