lunes, 5 de septiembre de 2022

Tras el atentando a Cristina, ahora Miauricio Macri dice que se siente perseguido: "El kichnerismo inició una cacería de enemigos simbólicos"

El ex hijastro de Flavia Palmiero cuestionó el rol de funcionarios y dirigentes del kirchnerismo, a quienes apuntó por el uso político del ataque a la Vicepresidenta. "Usan la oportunidad para debilitar la democracia", expresó en una breve carta que publicó en sus redes sociales.


Miauricio Macri acusó al kirchnerismo de utilizar el intento de magnicidio de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner "de forma partidaria" para "iniciar una cacería de enemigos simbólicos a los que les atribuye, sin ninguna racionalidad, la instigación a ese ataque".

En un comunicado bajo el poco inocente título "El atentado a Cristina Kirchner está amenazando al país con otras desgracias", el retrasado mental denunció que "el hecho violento que puso en riesgo la vida de la vicepresidenta y que mereció el repudio de todas las organizaciones y los dirigentes está siendo ahora utilizado por el kirchnerismo".

"En contraste, todos recordamos ahora la austera y responsable reacción que mereció de parte del Dr. Alfonsín su atentado en 1991, cuando de inmediato se negó a situarse como víctima o a utilizar políticamente el ataque como un ariete", señaló Macri, sin hacerse cargo de los discursos de odio que su espacio viene instalando contra la vicepresidenta desde hace un largo tiempo.

En un repaso solo por los últimos meses, se pueden mencionar como ejemplos las horcas y bolsas mortuorias durante protestas opositoras; las amenazas y piedrazos a la vicepresidenta; las declaraciones de la dipsómana titular del PRO, Patricia Bullrich Luro Pueyrredón, pidiendo firmeza y diciendo "no nos corre ni Cristina de la esquina de su casa”; el pedido de pena de muerte de un legislador opositor para CFK; las continuas agresiones y amenazas de grupos en la puerta de su domicilio, y la negativa del jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larrata a acatar la medida judicial dictada por el juez Roberto Gallardo que ordenó que la Policía de la Ciudad deje de custodiar la casa de CFK, entre otros.

En el escrito, Macri tampoco reconoce cómo los medios hegemónicos de comunicación replican y fomentan esos discursos de odio. Ni el ensañamiento de la justicia contra la vicepresidenta. “El propio ministro del interior estableció un vínculo directo entre editoriales de diarios, radio y televisión y el ataque a Cristina Kirchner. Esta atribución es tan irracional como el propio atentado y puede poner en peligro la vida de periodistas, la integridad de los medios de comunicación independientes y, a continuación, a la democracia misma”, opinó.

Como si fuese un recién llegado a la política y a las maniobras del poder real sobre los gobiernos populares, ahora plantea argumentos como si se tratara de un intachable defensor de la democracia y sus reglas de juego: “Por eso vengo acá a advertir a la opinión pública sobre esta maniobra que está usufructuando el atentado a Cristina Kirchner para alentar la persecución a la prensa y a la Justicia". Nada dijo ni le resultó extraño que la ex presidenta tuvo más de 500 causas en su contra.

Hay más definiciones de parte del hijo bobo de Franco Macri, cuya gestión estuvo caracterizada por una mesa judicial que espiaba y perseguía a opositores. "Usan la oportunidad para debilitar dos columnas esenciales de la democracia y, en ese acto, cambiar el curso de los acontecimientos judiciales que todos conocemos”, cerró el pelotudo hijo de puta su singular argumentación sobre el intento de asesinato a la vicepresidenta.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario