El alcalde capitalino aseguró que seguirán “siendo inflexibles en la respuestas” y que se recuperará “cada día de clase perdido”.
A través de una carta que publicó en su cuenta oficial de Twitter, Horacio Rodríguez Larrata se refirió por primera vez al conflicto generado por la toma de colegios en la ciudad de Buenos Aires.
Al respecto, el responsable político de la muerte del doctor Favaloro apuntó que “los padres son responsables de esto y van a tener que hacerse cargo del daño que sus hijos provocan”. Asimismo, aseguró que seguirán “siendo inflexibles en la respuestas” y que se recuperará “cada día de clase perdido”.
El texto que subió el jefe de Gobierno porteño se tituló “Hay un modelo de país que se está acabando”. Allí contextualizó sobre la “Argentina de estos días”, puntualizando en “ataques de grupos pseudo mapuches en Mascardi, extorsión de sindicatos de neumáticos, tomas autoritarias en algunas escuelas de la Ciudad y el kirchnerismo cambiando las reglas de juego que ahora no le convienen, queriendo derogar las PASO o aprobar leyes de lemas”.
“Hay un hilo conductor: son muestras de un modelo de país que fracasó y que resiste con mucha violencia porque se sabe cada vez más minoritario”, consideró Rodríguez Larreta, que utilizó como ejemplo la toma de colegios. “Mientras un grupo muy chico de alumnos, y de padres irresponsables, impiden que unos 5.000 chicos puedan estudiar, hay casi 200.000 que van a clases todos los días y ni piensan en tomar su escuela, y alrededor de 12.000 que están haciendo las prácticas educativas”, señaló.
“Los que piensan nada más que en sí mismos se están quedando solos. Nosotros vamos a seguir siendo inflexibles en la respuesta. Los padres son responsables de esto y van a tener que hacerse cargo del daño que sus hijos provocan. Hay límites y hay reglas que respetar. Y desde la Ciudad vamos a recuperar cada día de clase perdido, porque cada día cuenta. Educar es enseñar a vivir en democracia, es enseñar que las acciones tienen consecuencias y es marcar límites. Y eso es responsabilidad de las familias, pero también de la escuela. Y no vamos a esquivar esa responsabilidad”, agregóe.
“Especialmente cuando decide no ocuparse de cuatro pilares esenciales para que un país progrese, como la institucionalidad, el trabajo, la educación y la seguridad. Haciendo esto, descuida a la Argentina. La función primordial de cualquier gobierno nacional está incumplida. Es un panorama muy frustrante, pero déjenme ser optimista: son los últimos reflejos de un modelo de país que se está yendo. El que viene es mucho mejor y lo vamos a construir juntos”, concluyó.
En cuanto al conflicto en las escuelas, ya avanzada la semana, la tensión entre los centros de estudiantes y el régimen porteño persiste: 16 colegios de la CABA continúan tomados y, si bien algunas escuelas levantaron la medida de fuerza, el conflicto no tiene una fecha tentativa de finalización.
Las escuelas que permanecen tomadas o con pernocte son: el Mariano Moreno, el Esnaola, la Osvaldo Pugliese, la Agustín Tosco, la Claudia Falcone, la García Lorca, la Escuela de Cerámica N° 1, la Rodolfo Walsh, la Julio Argentino Roca, el Lengüitas, el Nicolás Avellaneda, el Danzas N° 1, la de Teatro, el Yrurtia, el Liceo 5 y el Carlos Pellegrini.
El martes el gobierno porteño informó que le pedirá a los padres de los estudiantes que tomaron el colegio Mariano Acosta 1.5 millones de pesos por día de ocupación del establecimiento. La patética ministra de Educación Soledad Acuña busca trasladar el costo de tener cerradas las escuelas y que sean las familias quienes afronten el pago del equivalente diario del salario de docentes y no docentes.
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