Más de 5 mil personas, en su mayoría mujeres, participaron del estudio que lleva adelante sociedades científicas de sexología. "Las fantasías hablan de las ganas de tener sexo, pero en dos semanas creemos que van a ser menores, por el impacto psicológico del confinamiento", advierten.
La actividad sexual más frecuente durante la cuarentena es la masturbación. Pero quienes expresan tener más satisfacción sexual no son aquellas personas que recurren al autoplacer sino las que mantienen relaciones en forma virtual, y en segundo lugar, las que rompieron el aislamiento para tener sexo. Los datos son preliminares y surgen de una encuesta electrónica que respondieron 5200 participantes de varios países, pero mayoritariamente de Argentina, mujeres y con una edad promedio de 30 años. El 43 por ciento respondió que tuvo fantasías sexuales con más frecuencia que antes del encierro obligado.
“Este dato nos sorprendió”, comentó la presidenta de la Sociedad Argentina de Sexología Humana (SASH), Silvina Valente, quien está terminado de procesar los resultados junto a integrantes de la Academia Internacional de Sexología Médica (AISM).
“Las fantasías hablan de ganas de tener sexo” a pesar del contexto de incertidumbre y temor al contagio que podría afectar el deseo. “Creo que en dos semanas van a ser menores porque de acuerdos a estudios realizados acerca del impacto psicológico del confinamiento, esperamos que aumente la ansiedad y la irritabilidad, y esto afectaría también a la sexualidad. Es lo esperable”, señaló Valente, que es jefa de Sexología del Departamento de Toco-ginecología del Hospital de Clínicas, de la UBA, en la ciudad de Buenos Aires.
La encuesta se hizo entre el 1º y el 10 de abril -en la segunda y tercera semana de la cuarentena obligatoria en el país- y volverá a repetirse la semana que viene y la posterior, con las mismas personas. Es una iniciativa de Valente y cinco académicos más de la AISM de otros países. La mayor cantidad de respuestas correspondieron a personas de Argentina, y luego de España, Uruguay y México. Pero también hubo respuestas de Ecuador, Perú y otros países de la región. La media de edad fue 30 años. En Argentina 27 -con extremos de 18 y 78 años-; el 67 por ciento de quienes respondieron, trabaja. No se trata de una muestra representativa. El estudio, exploratorio, refleja algunas tendencias.
“Se vio que hay parejas convivientes que prefieren masturbarse por miedo al contagio del coronavirus”, apuntó la presidenta de la SASH.
La amplia mayoría de quienes contestaron fueron mujeres. Del total que respondió, el 99 por ciento está cumpliendo la cuarentena en su casa. Pero 6 de cada 10 dijo que en su actual situación las condiciones no son adecuadas para mantener relaciones sexuales. ¿En qué condiciones están haciendo el aislamiento obligatorio? El 36 por ciento con la familia ampliada, el 24 por ciento, solos y en pareja el 22 por ciento. El 34 por ciento respondió que estaba en pareja conviviendo, el 33 por ciento, en pareja pero no conviviendo, y el 29 por ciento, sin pareja. Casi el 3 por ciento contestó que tenía más de una pareja. La amplia mayoría dijo ser heterosexual (83 por ciento), un 3 por ciento homosexual y un 13 por ciento bisexual.
Ante la pregunta sobre cuál es su actividad sexual en cuarentena, el 38 respondió que se masturba, el 33 por ciento que tiene relaciones con su pareja y el 13 por ciento, que no tiene ninguna. El 84 por ciento del total dijo tener satisfacción sexual alta o moderada ante de la cuarentena: de ellos, solo la mitad alcanza ese nivel durante el encierro.
“El encierro angustia, hay miedo al contagio, y generalmente mucha gente en la casa que no permite las condiciones adecuadas para lograr satisfacción sexual. También hay muchas parejas que no conviven y están separadas durante la cuarentena”, señaló Valente.
“Vivir plenamente la sexualidad mejora nuestra calidad de vida y es un aspecto fundamental a desarrollar y proteger en esta cuarentena ya que no solamente mejora el humor sino también contribuye a aumentar las defensas entre todos los beneficios que tiene a nivel biológico”, destacó la especialista.
También contó que la encuesta incluye una escala de satisfacción de acuerdo a la actividad sexual. “Los que más satisfacción expresaron son quienes tuvieron sexo virtual. Los que siguieron en los índices de satisfacción alto fueron quienes admitieron haber roto la cuarentena para tener sexo. Siempre la carencia y la emoción que te da la aventura aumentan el deseo”, destacó Valente.
La masturbación, aunque aparece como principal actividad sexual en la cuarentena, entre las personas encuestadas, es la que tiene menor nivel de satisfacción sexual, sin contar a quienes no tuvieron sexo directamente en el aislamiento obligatorio.
“Es muy probable que en las parejas que tenían mal sexo antes del confinamiento esta situación de encierro obligado empeore su situación”, comentó la Jefa de Sexología del Departamento de Toconigecología del Hospital de Clínicas. Y sugirió no trasnochar tanto, y mantener los horarios habituales de encuentros sexuales para no sufrir luego trastornos de sueño.
Fuente: nota de Mariana Carbajal para Página/12
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