El formoseño está en la etapa final de su recuperación y listo para regresar. El oficialismo recupera al presidente del interbloque y el número mínimo para sesionar. Unidad Ciudadana estudia accionar contra Luis Juez y Schiavoni.
El senador formoseño José Mayans está en la última etapa de recuperación y se prepara para volver a su banca en el Senado. Luego de una operación y dos meses de internación el jefe del interbloque del Frente de Todos está listo para volver al recinto.
“Está en la última etapa de la recuperación, pero va a estar para cuando llamen a extraordinarias”, explicaron desde el entorno del formoseño.
El dato no es menor si se tiene en cuenta que en los últimos meses la actividad en la Cámara que preside Cristina Fernández de Kirchner fue casi nula por la imposibilidad del oficialismo de asegurar el número que lo lleve el recinto.
Con la vuelta de Mayans no sólo vuelven las citas a Juan Domingo Perón en los discursos sino que el Frente de Todos se garantiza una mayoría con un voto de sobra si se tiene en cuenta el accionar de la riojana Clara Vega, el rionegrino Alberto Weretilneck y la misionera Magdalena Solari Quintana que suelen acompañar al interbloque oficialista.
El dato no es menor teniendo en cuenta que el Gobierno planea llevar varios temas al recinto que ya sabe que no cuentan con el apoyo de los bloques de la coalición de ultraderecha Juntos por el Cambio, como la creación de un impuesto para pagar el reclamo por la coparticipación a la CABA.
Además, la llegada de Mayans también servirá como una opción para reestablecer el diálogo. Primero, desde Juntos por el Cambio no se mostraron muy permeables a tener que negociar con Anabel Fernández Sagasti y Juliana Di Tullio, las dos senadoras que quedaron a cargo del interbloque. Y segundo, Mayans estuvo afuera los últimos meses por lo que no hay resquemores personales.
La relación, al igual que en la Cámara de Diputados, entre Juntos por el Cambio y el Frente de Todos no pasa por su mejor momento. Los chats filtrados del ministro de Seguridad de la ciudad de Buenos Aires, Marcelo D'Alessandro donde discute con el vocero del presidente de la execrable Corte Suprema cómo tiene que actuar el bloque de Juntos por el Cambio en el Senado en la disputa sobre la silla en el Consejo de la Magistratura, enardecieron el clima.
“Vamos a estudiar si cabe una denuncia penal contra (Luis) Juez y (Humberto) Schiavoni”, dijo Di Tullio en Radio 10. “Siguieron paso a paso el instructivo respecto a cómo reclamar el lugar en el Consejo de la Magistratura. Esa silla nos toca a nosotros, le toca a Unidad Ciudadana, a quien yo propuse como presidenta del bloque como representante ante el Consejo, al senador Martín Doñate. Ya lo dijeron no uno o dos jueces, toda una Cámara, y Rosatti sigue insistiendo”, resaltó.
Lo más probable es que en febrero el Senado retome la actividad normal pero en un escenario en el cual la campaña electoral ya va a estar presente y no se disimulará la tirantez reinante.
Y no es un tema menor teniendo en cuenta que en las elecciones del 2023 las provincias que renuevan sus bancas son Buenos Aires, Formosa, Jujuy, La Rioja, Misiones, San Juan, San Luis y Santa Cruz. La particularidad es que la cantidad de bancas en juego son similares tanto para Juntos por el Cambio como para el Frente de Todos.
En diciembre de 2023 se renovarán 24 bancas, 11 del Frante de Todos, 11 de Juntos por el Cambio y 2 de bloques unipersonales -Misiones y Hay Futuro Argentina-. Si se repiten los resultados del 2021, la oposición no alcanzaría la mayoría pero la Cámara Alta quedaría virtualmente en un empate.
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