Muy cercano al macrifascismo, el banquero fue desplazado de HSBC Argentina por no haber tomado medidas para prevenir maniobras de lavado de dinero.
Gabriel Martino trabaja junto régimen porteño con el objetivo conseguir vacunas de Pfizer para la ciudad de Buenos Aires.
El ex titular de la filial local del HSBC es uno de los encargados de llevar adelante la "diplomacia de las vacunas" porteña tras la autorización de Nación para que los distritos adquieran dosis.
"No voy a hablar de ese tema", respondió Martino al ser consultado. Sin embargo no negó que esté trabajando con su red de contactos para conseguir vacunas de Pfizer.
Martino es un ejecutivo con vuelo internacional. Amigo personal de Horacio Rodríguez Larrata y de su hermano Augusto, también es muy cercano a Miauricio Macri Blanco Villegas y esa cercanía le costó la presidencia de la filial argentina del HSBC tras la derrota del PRO en las paso de 2019.
Con el regreso del kirchnerismo al poder, tuvo una salida elegante y partió por seis meses a Londres a la sede de la Hongkong and Shanghai Banking Corporation y dejó su cargo para fundar su propia consultora, BFLInvest. Nunca perdió su cercanía con el macrifascismo.
Desde la CABA habían anticipado a este sitio que tras la "autorización" de Santiago Cafiero harían todo lo posible para conseguir dosis, aunque aclararon que, de llegar a buen puerto, las repartirían entre todas las provincias argentinas. Una excelente plataforma de lanzamiento para el proyecto presidencial de Rodríguez Larrata.
Durante el nefasto régimen del hijo bobo de Franco Macri, Martino era prácticamente un ministro sin cartera, que actuaba como consejero presidencial y tenía acceso directo tanto a la quinta de Olivos como a Los Abrojos.
En su último año de mandato, Cristina Fernández de Kirchner ordenó al Banco Central que eche a Martino del HSBC por no haber tomado medidas para prevenir maniobras de lavado de dinero, después de la aparición de 4.000 cuentas sin declarar de argentinos en la sucursal suiza del banco.
Las acciones incluyeron multas de varios millones de pesos y denuncias judiciales contra Martino, que hasta se tomó unos meses afuera del país. Todo el embate judicial se frenó inmediatamente después de la llegada de Macri Blanco Villegas a la Casa Rosada.
En ese momento, el banquero preferido del mamertoi no solamente volvió a asumir la conducción del HSBC Argentina, sino que también participó en la mayoría de las emisiones de deuda y hasta colocó a la vicepresidenta de la Unidad de Información Financiera (UIF), la entidad pública que se encarga de combatir el lavado de dinero, delito por el cual estaba acusado. Martino fue el único en querer financiar los polémicos proyectos de PPP y estuvo detrás de la elección de Pichotto como candidato a vicepresidente.
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