Astilleros Río Santiago en peligro: los planes de Macri Macri Blanco Villegas para privatizar y vaciar la empresa

En una reunión celebrada en Mar del Plata entre el ex hijastro de Flavia Palmiero y los más importantes empresarios navales, el subnormal les reveló sus sádicos planes para el Astillero Río Santiago, aunque su administración corresponda al estado bonaerense. En esa reunión llevada a cabo en el marco de la "Mesa de Pesca", el 13 de julio, Macri Blanco Villegas les ofreció a los empresarios que se "hagan cargo" de la empresa con el objetivo de vaciarla. 

Apenas se conocieron los planes presidenciales, los trabajadores reaccionaron para defender la continuidad del astillero a través de una conmovedora marcha de antorchas.

En la reunión, el hijo bobo de Franco Macri reveló que considera al astillero un problema y comenzó a evaluar soluciones junto con los empresarios. 

“¿Qué hago con el Astillero Río Santiago?”, preguntó Macri Blanco Villegas. “Hay que dinamitarlo”, le contestó Domingo Contessi, presidente de Astillero Contessi y vicepresidente de la Federación de la Industria Naval Argentina. El subnormal retrucó: “¿Y si te hacés cargo?”. Contessi fue contundente en su negativa: “hay más de tres mil tipos que figuran y sólo 700 que fichan”. El idiota confeso, según publica el portal Infocielo.com, insistió: “¿Y si lo recibís con 600?”. También hubo varios empresarios navales que hicieron “lobby” para cerrar la empresa provincial.

Ni el régimen fascista nacional ni el bonaerense tienen todavía una decisión con respecto al futuro de la empresa estatal. En mayo, Vidal intervino por decreto la empresa, corriendo de la presidencia a Cristian Curto y nombró como interventor a Daniel Capdevila, ex Coordinador de Proyectos del Ministerio de Modernización de la Nación, el sector desde donde surgen muchos de los planes de ajuste.

Con Capdevila, los trabajadores denuncian persecuciones y negociados, como la tercerización de los servicios médicos. No hubo dinero para insumos o nuevos proyectos. Los trabajos en los buques petroleros Eva Perón y Juana Azurduy están paralizados, y su entrega lleva un año de demora.