Los dirigentes gremiales pidieron que el beneficio sea para todos los trabajadores, tanto del sector público como del privado, aunque todavía no está definido el monto. El Gobierno aseguró que todas las medidas están siendo analizadas y que la decisión final la tendrá el presidente Alberto Fernández.
Ya adentrados en noviembre y con una inflación a la baja, pero que no cesa, el Frente Sindical, que lidera Pablo Moyano, se reunió ayer con la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, y le reclamó un bono de fin de año para todos los asalariados, tanto públicos como privados. Por parte del Gobierno todavía no hay una definición al respecto, pero es una medida que está siendo analizada.
El encuentro se produjo en la sede de la cartera laboral y del mismo participaron, además del secretario adjunto de Camioneros, Mario Manrique, de SMATA; Omar Plaini, de los canillitas; Juan Pablo Brey, de los aeronavegantes; Cristian Jerónimo, de los vidrieros, y Graciela Aleñá, de los empleados viales, entre otros.
La conversación con los dirigentes gremiales se dio en el marco de una serie de charlas que viene teniendo la funcionaria con diferentes sectores desde que asumió en el cargo en reemplazo de Claudio Moroni, hace poco menos de un mes.
De hecho, durante este tiempo la nueva ministra ya se reunió, por ejemplo, con los referentes de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), de la Confederación General del Trabajo (CGT) y de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT).
En esta línea, ahora recibió en su oficina a los integrantes del Frente Sindical, quienes le reclamaron el pago de una suma fija a fin de año para todos los empleados, similar al que se les va a entregar a las personas de entre 18 y 64 años que no perciban ingresos, asistencia del Estado o tengan bienes registrados.
Ante este pedido, Olmos sostuvo que el Gobierno viene haciendo un esfuerzo sostenido para tratar de mantener el poder adquisitivo de los salarios y destacó especialmente que han apoyado las “paritarias libres”.
Por su parte, los sindicalistas argumentaron que existen gremios en los que los últimos aumentos acordados fueron absorbidos en gran parte por el impuesto a las Ganancias y aseguraron que hay incluso casos en los que el sueldo no llega a cubrir la canasta básica.
En este sentido, el grupo liderado por Moyano consideró que las autoridades nacionales podrían otorgar un bono o suma fija en diciembre para todos los trabajadores, tanto públicos como privados, para paliar esta situación.
Si bien se mostró predispuesta a implementar una medida de este tipo, la ministra no les dio una respuesta definitiva a los gremios y remarcó que todas las iniciativas están siendo analizadas por su cartera y que la decisión final la tendrá el presidente Alberto Fernández.
“Por supuesto que hay que trabajar la suma fija, porque lo planteó la vicepresidenta y porque es imperativo trabajar para que los salarios mejoren”, reconoció la propia Olmos durante una entrevista que brindó a El Destape radio poco después de la reunión con los gremialistas.
Sobre este punto, la funcionaria aclaró que “habría que ver como les impacta” esta ayuda a los empleados del sector registrado, teniendo en cuenta el impuesto a las Ganancias, y aclaró que “los monotributistas e informales no la recibirían”.
En tanto, en diálogo con la prensa que lo esperaba a la salida del encuentro, Moyano contó que vio “muy buena predisposición por parte de la ministra” y que “todavía no se habló” sobre cuál sería el monto de esta eventual suma fija.
“También hablamos de poder exceptuar de Ganancias el aguinaldo a fin de año, y también el tema de las asignaciones familiares, que es un reclamo que ya le hemos hecho al compañero Sergio Massa, para que muchos más trabajadores reciban el beneficio”, agregó.
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