La tensión escaló luego de que los senadores de Juntos por el Cambio, Juan Carlos Romero y Luis Naidenoff, pidiesen ampliar el período de revisión del endeudamiento de parte de AGN a las cuentas de 2020 y de 2021. "Una cosa fue lo que se hizo en periodo de Macri y ahora otra lo que pasó ahora producto de la pandemia, que tiene consecuencias", esgrimió Mayans, al oponerse.
El jefe del bloque de senadores nacionales del Frente de Todos, José Mayans, cruzó ayer a los opositores Miguel Comisión Bicameral revisora de cuentas en la que se aprobó el programa de acción anual 2022 de la Auditoría General de la Nación (AGN).
En un encuentro conducido por el presidente de la Bicameral, el senador del Frente de Todos, Mariano Recalde, Mayans mantuvo un tenso intercambio de opiniones con el exsenador y actual auditor Pichotto y el jefe de los diputados de la UCR, Negri.
La tensión escaló luego de que los senadores de Juntos por el Cambio, Juan Carlos Romero y Luis Naidenoff, pidiesen ampliar el período de revisión del endeudamiento de parte de AGN a las cuentas de 2020 y de 2021, con el argumento de que "las deudas son de todos y no debe ser solo tenido en cuenta el periodo 2016-2019".
Ante este pedido, Mayans consideró que "no tiene nada que ver el período comprendido entre 2015 al 2019 (años del régimen macrifascistao) con el del 20 al 21 porque son cuestiones distintas, es fundamental saber qué se hizo en esa época y por qué fueron al FMI sin pasar por el Congreso".
En este sentido, en representación del Frente de Todos, la auditora y ex senadora Graciela De la Rosa solicitó hacer la diferenciación entre deuda externa y deuda interna, y sostuvo que llamaba la atención que en el período del macrismo la deuda se incrementó en 120 mil millones de dólares, algo "nunca visto en la historia argentina".
A su turno, Pichotto declaró que "deuda y emisión son las dos caras de una misma moneda" ya que "son factores de déficit fiscal" que padece Argentina y consideró que "la auditoría no debe ser un servicio forense" sobre las cuentas públicas sino "un aporte para un mejor funcionamiento de las instituciones".
Ante esto, Mayans recriminó: "No estoy de acuerdo con los términos que utilizaron, esto de que hacen una especie de control forense. El pueblo quiere saber de qué se trata, hay una ejecución presupuestaria, señores presenten los papeles" porque "cuando no se aprueban las cuentas se les dice señores qué está pasando, qué hicieron con esto", expresó.
El senador por Formosa se refería a la cuenta de inversión del año 2016, primer año del gobierno de Cambiemos, que fue rechazada por el control parlamentario de la Bicameral Revisora de Cuentas por irregularidades y que, a su criterio, debería ser investigada por la Justicia.
"Todo debe ser aprobado por el Congreso. La cuenta de inversión es fundamental para saber si la ejecución del presupuesto estuvo de acuerdo a la ley para saber por qué hubo incumplimiento porque estamos hablando de fortunas", remarcó Mayans y agregó que el macrismo dejó un sistema previsional "prácticamente quebrado" y que el rol de la Auditoría es "meramente técnico y no político".
Pichotto respondió con una chicana al agradecer "el aporte casi docente" que hizo el senador Mayans sobre la tarea de la AGN, señaló que "no hay ningún tipo de interés de ocultar absolutamente nada" sobre los años de gestión de Juntos por el Cambio y aseguró que por el contrario había organismos que limitaban la entrega de información para las auditorías.
"Cuando hablé de temas forenses -le aclaró a Mayans- me refería a tiempos viejos. Entre bomberos no nos pisemos la manguera, somos un aporte técnico político, tenemos mirada técnica pero también política institucional". "No estamos tan lejos de lo que usted dice y lo que yo digo", acotó.
Negri pidió también la palabra para expresar su desagrado por las expresiones de Mayans, le aseguró que "podía dormir tranquilo" sobre la tarea de auditoría que se agilizaría y aclaró que la oposición tiene la presidencia de la AGN (con el radical Jesús Rodríguez a cargo) pero no la mayoría".
En el inicio de la reunión, Pichotto había pedido incluir en los pedidos de informes los gastos vinculados a las vacunas y a la atención por la pandemia de Covid al indicar que su rendición forma parte de las metas fijadas para 2023 en el acuerdo del Gobierno con el FMI para la refinanciación de la deuda.
Mayans dijo al término del encuentro que fue "una maniobra" el pedido de incluir el endeudamiento de 2020 y de 2021, plena pandemia, y equipararlo con el endeudamiento público y la deuda con el Fondo adquirida en el período de 2016 a 2019, durante el gobierno de Mauricio Macri. "Una cosa fue lo que se hizo en periodo de Macri y ahora otra lo que pasó ahora producto de la pandemia, que tiene consecuencias", esgrimió.
En el final del encuentro, la delegación de auditores presidida por Jesús Rodríguez confirmó que en agosto estarían en condiciones de aprobar la cuenta de inversión de 2018 y se comprometieron a agilizar el trabajo para adelantar los períodos revisados.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario