miércoles, 9 de septiembre de 2020

Acuerdo entre el oficialismo y la oposición en Diputados: seguirán las sesiones remotas pero se tratarán en forma presencial los temas más conflictivos

Reforma Judicial, Presupuesto y Movilidad Jubilatoria serían tratados con más legisladores presentes que conectados desde sus provincias. Cómo serán las sesiones presenciales.


Tras una semana de tensión, cruces y hasta un amparo judicial que presentó el interbloque de Juntos por el Cambio para invalidar el protocolo de funcionamiento remoto en Diputados, primó el diálogo sobre el disenso y oficialismo y oposición acordaron que para los temas conflictivos las sesiones podrán ser mixtas pero con mayor presencialidad. 

Será a la inversa de lo que ocurrió hasta ahora desde el inicio del aislamiento social, habrá más diputados conectados en forma remota mientras que los que integren grupos de riesgo participarán a la distancia. Además se continuará con la modalidad de teleconferencia para temas no conflictivos y de consenso.

El clima, dijeron varios de los presentes en la reunión de jefes de bloques convocada por Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados, fue radicalmente diferente al del martes 1° de septiembre. Ayer, en cambio las charlas arrancaron desde el punto en el que la semana pasada se frustró la negociación, cuando estuvieron a punto de firmar un acta con la propuesta de Eduardo "Bali" Bucca (jefe del interbloque Federal) para poder tratar cualquier tema a partir de ahora en Diputados pero garantizar sesiones presenciales a pedido de algún bloque y para cuestiones puntuales y conflictivas.

El acta tiene tres puntos centrales: renovar el protocolo de funcionamiento parlamentario acordado el 13 de mayo por 30 días hábiles (a contar desde la fecha); mantener las comisiones en forma remota para todos los temas, sin excepción, y con dictamen con firma digital y, finalmente, habilitar la posibilidad de que a requisitoria de un bloque político se podrán tratar temas con mayor presencialidad. Los temas, que no se precisaron por escrito pero sí se charlaron, serían Reforma Judicial, Presupuesto 2021 y Movilidad Jubilatoria. Juntos por el Cambio no pediría presencialidad para debatir el llamado ‘impuesto a la riqueza’, el Aporte Solidario Extraordinario de Máximo Kirchner y Carlos Heller porque dentro del interbloque hay diputados dispuestos a votarlo.

Según se conversó, las sesiones presenciales serían posiblemente en un estadio amplio, con buena ventilación de manera de cumplir las exigencias sanitarias en el marco del Covid-19. Será condición para pedir presencialidad que la presentación lleve la firma de al menos diez diputados y con siete días de anticipación. En tal caso la sesión será obligatoria para todos los diputados excepto quienes integran grupos de riesgo o quienes lo justifiquen ante la Presidencia de la Cámara. Lo que no se mencionó, al menos en Labor Parlamentaria, fue el amparo judicial que recayó en el Juzgado Contencioso Administrativo N° que subroga el juez Enrique Lavié Pico que impulsó la principal oposición contra la legalidad de la última sesión.

En el encuentro estuvieron en forma presencial, además de Massa, el jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, Mario Negri, y los del PRO y la Coalición Cínica, Cristian Ritondo y Maximiliano Ferraro, además de Juan Manuel López y Silvia Lospennato, una de las que más conoce el reglamento; Máximo Kirchner, Cecilia Moreau y Cristina Alvarez Rodríguez por el Frente de Todos; y Nicolás del Caño y Romina del Plá por la izquierda. José Luis Ramón, del bloque Unidad y Equidad para el Desarrollo estaba en Buenos Aires porque la semana pasada se quedó para evitar el aislamiento de 14 días que obliga Mendoza mientras que el rionegrino Luis Di Giacomo (Juntos Somos Río Negro) viajó especialmente para defender la validez de la sesión de la semana pasada. El ex ministro rionegrino llegó con barbijo verde con el nombre de su provincia estampado. También estuvieon el monzoísta Felipe Alvarez (Acción Federal) y las autoridades de la Cámara: el vicepresidente Alvaro González, larretista del PRO; y los secretarios Parlamentario y Administrativo, Eduardo Cergnul y Rodra Rodríguez.

Frente a la mesa cubierta con mantel azul hubo una pantalla para que participaran en forma remota los otros jefes de bloques:  "Bali" Bucca habló desde Bolívar; Ricardo Wellbach (Frente de la Concordia) desde Misiones; Alma Sapag (MPN) desde Neuquén y Carlos Gutiérrez desde Córdoba como representante del bloque de cuatro diputados que responde al gobernador Juan Schiaretti. También estuvieron vía teleconferencia el presidente de la UCR, Alfredo Cornejo; el socialista Enrique Estévez; el progresista Luis Contigiani; Beatriz Avila (ex Juntos por el Cambio y ahora Partido por la Justicia Social) y Daniela Vilar (Frente de Todos), presidenta de la comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento que "compite" con Lospennato.

Cristian Ritondo hablaba por celular en un pasillo a oscuras. Maximiliano Ferraro caminaba de un lado a otro también hablando por celular. “Empezó”, avisó una secretaria que salió a buscarlos desde el Salón de Honor de la Presidencia de la Cámara de Diputados después de que se sentara Máximo Kirchner, el último en pasar del despacho de Sergio Massa hasta allí.

En la previa hubo reuniones en el segundo y tercer piso. Los integrantes del interbloque de Juntos por el Cambio se juntaron en el despacho de Mario Negri que ayer a la tarde llegó desde Córdoba. A diferencia de la semana pasada hubo cruces telefónicos que permitieron alumbrar un acta de acuerdo. A las cinco Massa llamó a Negri. Hacía más de un mes que no se comunicaban por esa vía y personalmente sólo habían charlado (y discutido) el martes pasado en la extensa reunión de Labor Parlamentaria que fracasó luego de 8 horas. Kirchner esperó en su despacho y habló con el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro y con Ritondo.

A pesar de los intercambios hubo prudencia en las declaraciones de los distintos diputados al llegar a la reunión, tal vez con el temor de que se cayera el posible acuerdo. El aviso opositor fue que aceptarían el funcionamiento remoto para cualquier tema excepto la Reforma Judicial, la Movilidad Previsional y el Presupuesto. No está escrito pero es lo cosensuado verbalmente.

La Presidencia de Diputados quedó habilitada para conseguir un lugar donde se "mude" temporariamente el Parlamento ya que habría más de 150 diputados presentes. Según los cálculos de la Cámara baja, entre 90 y 95 diputados hoy integran los grupos de riesgo por ser mayores de 60, tener enfermedades preexistentes o cursar un embarazo. Las seiones virtuales continuarán con el sistema mixto de 47 diputados en el recinto y 210 conectados remotamente.

La reunión de Labor Parlamentaria arrancó media hora después del horario de convocatoria. En el salón se dispuso una amplia mesa con mantel azul, micrófonos para todos, sillas cubiertas de tela bordó y alcohol en gel en cada sitio.

En la premura por mostrar la buena predisposición, desde adentro del Salón de Honor y antes de firmar el acta, Negri, Ritondo y Ferraro se comunicaron con sus respectivos bloques y luego subieron a sus despachos para comunicar el acuerdo vía zoom.

Antes de volver a bajar al primer piso, desde Juntos por el Cambio calificaron como “altamente positiva” la reunión en la que además Massa dio un cronograma de los plenarios de comisión para tratar la reforma judicial: sólo con los expositores ya anotados insumiría al menos seis semanas. Entonces, antes de avanzar y votar, deberán renovar nuevamente el Protocolo de funcionamiento.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario