martes, 10 de mayo de 2022

En medio de las críticas de parte del Frente de Todos, Guzmán defendió su plan y dijo que el Gobierno de Cristina tuvo "inconsistencias macroeconómicas"

El ministro de Economía anticipó que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de “abril es menos malo que marzo", cuando la inflación trepó 6,7%, y afirmó que “es una obviedad” que tiene que adelantarse el aumento del salario mínimo, vital y móvil.


Martín Guzmán sostuvo que el debate público de las diferencias al interior de la coalición de Gobierno es bienvenido si "lleva a la Argentina a construir un sentido común que permita salir de la inestibilidad del rumbo y nos pone en un lugar de mayor firmeza para avanzar en el crecimiento con inclusión social" y afirmó que "lo que hoy plantea Alberto Fernández es algo que tiene mucho sentido para la Argentina".

Con ese tono, confirmó que se avanzará en la segmentación de las tarifas de energía, que no habrá incremento a las retenciones, que se buscará reducir la cantidad de planes sociales como el plan Potenciar Trabajo y que los incrementos y adelantos del Salario Mínimo Vital y Móvil se continuarán debatiendo en el Consejo del Salario. "Es una obviedad que en el SMVM tiene que haber una adelanto para que crezca en téminos reales", sostuvo Guzmán ayer, en declaraciones a radio Urbana Play.

También destacó la ayuda social y económica que ofreció el Gobierno durante la pandemia y tras el impacto inflacionario que generó la guerra en Ucrania. En ese sentido, Guzmán habló de la reapertura de paritarias, coincidió con los dichos de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner al sostener que "el salario real debe crecer y el crecimiento debe ser equitativo", y adelantó que se espera que más de 6 millones reciban el bono de la ANSeSs de 18 mil pesos.

Guzmán adelantó que la inflación de abril rondará el 6% y reconoció que es "el foco principal" de las acciones de política económica. "Hay que atacarla con firmeza y para eso se precisa de un programa económico consistente, que ayude a la recuperación económica, a incrementar las reservas y bajar el déficit fiscal", indicó el ministro y volvió sobre lo que generan los debates públicos sobre el rumbo de Gobierno al considerar que ese plan debe ser "creíble para que no haya dudas de lo que se está llevando adelante".

"Bienvenido, llevemos adelante este debate. Por nuestra parte lo que mantenemos es un compromiso firme con este programa económico porque creemos que es para la recuperación económica y va a sentar las condiciones para poder bajar la inflación", sostuvo en respuesta a los ruidos internos.

El debate público con la vicepresidenta y un sector del kirchnerismo

La extensa entrevista a Guzmán de la periodista María O'Donell estuvo cruzada por las críticas públicas que le llegan por parte de diputados, funcionarios y referentes del kirchnerismo dentro de la coalición de Gobierno. En el marco de ese debate público, Guzmán se refirió a la gestión de los gobiernos de Cristina como "de logros importantes, pero también de inconsistencias macroeconómicas".

Entre los logros, Guzmán mencionó la becas Conicet -de las que se mostró agradecido porque recibió ese respaldo para poder estudiar en los Estados Unidos-, la Asignación Universal por Hijo y la recuperación de los haberes de los jubilados; pero también marcó los problemas de inconsistencias en el nivel de emisión y de subsidios.

En otro tramo, Guzmán se refirió al bimonetarismo, otro de los puntos sobre los que la vicepresidenta es crítica en sus discursos. "No es consistente pensar que el Estado puede vivir de pedir prestado o emitir una moneda que la gente, por efecto de la inflación, cada vez quiere menos. Si hay bimonetario hay que ser cuidadosos con la emisión y si no hay crédito elegir dónde se utilizan los recursos", señaló.

El ministro de Economía consideró que el debate del sistema bimonetario "se tiene que dar con seriedad" y enterró los planteos del diputado Javier Milei, quien plantea una dolarización de la economía. "La Argentina necesita una moneda propia, y necesita fortalecer su moneda. La idea de que la Argentina pueda hacer un desarrollo virtuoso sin tener moneda, no tiene ningún fundamento. La idea de que la Argentina va a poder hacer un ajuste brutal del gasto público y que eso va generar más oportunidades tampoco tiene ningún sustento", sentenció.

Acuerdo con el FMI y tarifas

Las diferencias entre Guzmán y sectores del kirchnerismo aparecieron en el repaso de la negociación con el FMI y en temas que se resolverán en los próximos días como la audiencia pública que definirá la suba de tarifas de servicios.

"En la Argentina, la principal limitante al sostenimiento del crecimiento es la restricción de divisas", reafirmó, pero planteó de cara al debate público con el kirchnerismo en torno al acuerdo con el FMI: "Si queríamos tener más dólares, ¿necesitábamos un acuerdo que le permite a la Argenitna seguir en condiciones de mantener la recuperación económica o había que ir al default?".

"Hubo gente que votó en contra de un acuerdo", apuntó contra los diputados de La Cámpora, liderados por el diputado Máximo Kirchner, y respondió: "Sin un acuerdo con el FMI iba a ver menos dólares, y cuando en Argentina hay menos dólares, hay ajuste. El no acuerdo era ajuste. Lo que había lograr era un acuerdo de no ajuste y es lo que logramos".

En ese punto, Guzmán también aprovechó para recuperar el debate generado por su participación del encuentro de la Fundación Foro Llao Llao y dijo que la negociación con el FMI fue una de "las disputas de poder que realmente importan para la Argentina". El ministro aseguró que "yo no tuve a nadie a mi izquierda". Y puso como ejemplo las negociaciones con las provincias, mencionó en particular a la provincia de Buenos Aires, al momento de frenar los pagos para presionar al fondo en la negociación.

En cuanto a la suba de tarifas, para las que esta semana habrá una audiencia pública y es resistida por funcionarios del kirchnerismo en la Secretaría de Energía, Guzmán afirmó que "el Gobierno ha decido un curso de acción y se va a seguir sobre esa base" y calificó a la segmentación como "un punto de partida importante y un cambio estructural de cómo administrar subsidios energéticos".

El titular del Palacio de Hacienda también dejó claras las coincidencias con la vicepresidenta y dentro de la coalición de gobierno: "Hay un objetivo absolutamente compartido que es que el salario real debe crecer, que el crecimiento debe ser equitativo. No es una recuperación, no es desarrollo si no es con igualdad".

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