Desde el 28 de junio próximo, el Tribunal Oral Federal 2 comenzará a escuchar los alegatos finales, primero de la querella de la víctima, el empresario aduanero Gabriel Traficante, y luego del fiscal Diego Luciani.
El primer juicio oral al detenido Marcelo D'Alessio por intento de extorsión a un empresario para no involucrarlo en una causa judicial entró en la etapa final de alegatos, tras un debate en el cual los otros acusados derivaron toda la responsabilidad sobre el falso abogado.
Desde el 28 de junio próximo, el Tribunal Oral Federal 2 comenzará a escuchar los alegatos finales, primero de la querella de la víctima, el empresario aduanero Gabriel Traficante, y luego del fiscal Diego Luciani. El abogado de Traficante, Luis Charro, podrá argumentar pero no pedir monto de penas, algo que estará a cargo de la fiscalía.
Además de D'Alessio, son juzgados el suspendido fiscal de Delitos Complejos de Mercedes, Juan Ignacio Bidone, y los ex agentes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Rolando Barreiro y Claudio Alvarez
El juicio por el intento de extorsión a Traficante, a quien según la acusación le reclamaron un pago en dólares para evitar quedar involucrado en una causa conocida como la "mafia de los contenedores", comenzó el 8 de marzo y se realiza de manera virtual.
D'Alessio tiene prisión preventiva, está detenido en la cárcel de Ezeiza y enfrenta una acusación como autor del delito en tanto que Barreiro y Álvarez son considerados partícipes necesarios del intento de extorsión.
El fiscal Bidone, por su parte, está procesado por intento de extorsión y abuso de autoridad, ya que según la acusación, usó su cargo para conseguir información sobre Traficante -registros de sus llamados y movimientos en Migraciones- que luego entregó a D'Alessio y fueron usados para intentar extorsionar al empresario.
Los jueces del TOF2 Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Enrique Signori prevén escuchar los alegatos de querella, fiscalía y las cuatro defensas desde fines de junio y durante julio, ya que el juicio se realiza una vez por semana. Luego será el momento de las últimas palabras y veredicto.
A lo largo del juicio, en sus indagatorias, los acusados apuntaron a D'Alessio, como fue el caso del fiscal Bidone, quien admitió que se dejó llevar por la personalidad y los dichos del falso abogado y atribuyó lo ocurrido a su modo de trabajar y su carácter "confianzudo".
Bidone tuvo a su cargo la investigación del llamado "triple crimen" de General Rodríguez, el caso de tres jóvenes empresarios asesinados en un hecho que se vinculó al tráfico de efedrina, y en ese marco conoció a D'Alessio y comenzó a intercambiar información.
"Se hicieron con la información que yo contaba con la excusa de que la analizarían, tomaron todo lo que le facilité y desaparecieron", dijo en el juicio y sostuvo que D'Alessio "abusó" y usó esos datos con otros fines.
También contó que había sido convocado a la sede de la Agencia Federal de Inteligencia por sus entonces titulares Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, quienes le hicieron saber que "recibiría colaboración" en la causa en la que estaba prófugo Ibar Pérez Corradi.
"Consideré en este contexto la llegada de Rolando Barreiro, la persona que luego me presenta a Marcelo D'Alessio y a Claudio Alvarez", dijo también.
Para obtener la información que después le dio al falso abogado usó claves de acceso de sus empleados de la fiscalía, según declararon sus subordinados como testigos en el juicio.
Bidone dijo que los teléfonos de Traficante fueron una línea más entre muchas en su "afán de investigar" las causas del Triple Crimen de General Rodríguez, tráfico de efedrina, mafia de los contenedores, entre otras.
El ex espía Barreiro, por su parte, dijo a los jueces que nunca tuvo la "exposición mediática" del abogado preso que solía ser invitado a programas televisivos para hablar de casos resonantes en su rol de experto en narcotráfico.
D'Alessio habló en el juicio para denunciar que se manipuló su teléfono celular y se insertaron mensajes que nunca envió ni recibió. El falso abogado está procesado también como presunto jefe de asociación ilícita en la causa que investiga espionaje ilegal en la justicia federal de Dolores.
Por Karina Poritzker para Télam
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