Fue ayer a la mañana en el Salón Bermejo, en el cuarto piso del Palacio de Tribunales. Los supremos encabezaron la jura de los representantes de los abogados, los jueces, los académicos y el del Poder Ejecutivo.
En una ceremonia breve, sin público y sin periodistas, la nefasta y corrupta Corte Suprema de Justicia de la Nación le tomó juramento ayer a once de los nuevos integrantes del Consejo de la Magistratura. Es el comienzo de una nueva etapa en el órgano encargado de la selección y acusación de jueces, con la asunción de sus nuevos miembros que estarán hasta 2026. Los que faltan jurar son los integrantes en representación de la Cámara de Diputados y de la Cámara de Senadores. Ahí la designación del senador Martín Doñate es la que provoca más polémica. De eso ayer nadie habló, aunque todos los consejeros están expectantes de la decisión que pueda tomar la Justicia sobre la ocupación de esa banca por la segunda minoría de la cámara alta.
Puntualmente a las 10 de la mañana, apenas un rato después de la derrota de Argentina en su debut en el mundial de Qatar, los consejeros electos fueron llegando al Palacio de Tribunales. Los esperaba un grupo de una veintena de soretes y soretas del grupo “Equipo Republicano” con banderas de argentina, fotos del fiscal Diego Luciani y carteles contra la corrupción. Con la música del himno nacional, coreaban “Doñate usurpador”.
Los consejeros subieron las escalinatas de la calle Talcahuano y enfilaron hacia al cuarto piso del salón Bermejo donde los esperaban el titular de la Corte y del Consejo de la Magistratura, Horacio Rosatti; el vicepresidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz; el ministro decano Juan Carlos Maqueda; y el ministro Ricardo Lorenzetti.
El acto no duró más de 20 minutos. Arrancó con el saludo formal de buenos días del presidente de la Corte a los consejeros que estaban ubicados en primera fila esperando ser llamados. Eran pocos los invitados a la jura. Es que el salón tiene lugar para 50 personas. Y los consejeros solo podían invitar a tres allegados. La lista de los presentes la armó cada uno de los protagonistas. Algunos incluso eligieron no invitar a familiares pero sí a colegas o figuras políticas.
Fue así que muchos que pensaban participar se quedaron sin poder pasar. Les pasó a jueces como Leopoldo Bruglia y Karina Perilli que se acercaron hasta el edificio pero no estuvieron presentes en la jura. Sí se acercaron a saludar a los jueces elegidos, pero en su despacho. Para el mediodía, la Asociación de Magistrados preparó un brindis con los consejeros jueces. El presidente de esa entidad Marcelo Gallo Tagle estuvo presente junto a la ex jueza en lo comercial María Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero, madre de Agustina, una de las que juraban. La prensa tampoco pudo acceder al acto. Se repitió la escena de las ceremonias de jura de abril, cuando se puso en juego la composición de 20 integrantes.
Los primeros en ser llamados a prestar juramento fueron los académicos Hugo Galderisi y Guillermo Ricardo Tamarit, en representación del ámbito científico y académico. A ellos los estaba acompañando Diego Molea, que se encargó de invitar al ministro de Educación Jaime Perczyk, que aplaudió con entusiasmo. Al término de la jura se lo vio conversando con el presidente de la Corte y el resto de los jueces.
Después les tocó jurar a los representantes de los abogados. Ahí desfilaron Miguel Alberto Piedecasas, Héctor Pedro Recalde, María Isabel Jimena de la Torre y María Fernanda Vázquez. Piedecasas era el más contento, que volvía después de seis años a integrar el cuerpo. Había invitado a su jura al diputado radical Mario Negri. A De la Torre a la que se la escuchó mas preocupada por la derrota de Argentina en el partido que acaba de terminar. Antes había posado para la foto junto a los manifestantes de la puerta.
El turno siguiente para prestar juramento fue para los jueces Diego Gustavo Barroetaveña, Alberto Agustín Lugones, María Alejandra Provítola y Agustina Díaz Cordero, en representación de la magistratura. Barroetaveña es el juez de la Cámara de Casación que tiene que resolver, junto a sus colegas, si se reabren las causas de Hotesur-Los Sauces y Memorándum con Irán, que tienen como imputada a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Hacía rato que un integrante de Inodoro Py no se sumaba al organismo que selecciona y controla a los jueces.
El último en jurar fue el representante del Poder Ejecutivo Gerónimo Ustarroz, que renueva su puesto en este organismo. Llevaba camisa blanca y corbata celeste, en sintonía con el clima futbolero. Eligió no retirarse por la puerta principal donde esperaban los fotógrafos. El integrante número 12 es Horacio Rosatti, presidente de la Corte que, por su cargo, encabeza el Consejo.
Ahora habrá que esperar a saber cuándo se sumarán los ocho representantes del Congreso -cuatro diputados y cuatro senadores- que faltan. Se trata de los diputaos del Frente de Todos Vanesa Siley y Rodolfo Tailhade, del PRO Álvaro González y del radicalismo Roxana Reyes. Y de la designación que hizo el Senado, en una sesión conducida por la presidenta provisional del Senado, Claudia Ledesma Abdala de Zamora, en donde se avaló el decreto parlamentario 86/22 que designó como consejeros a los oficialistas María Pilatti Vergara, Mariano Recalde y Martín Doñate y al radical Eduardo Vischi.
Los ojos están puestos en Martín Doñate en representación de la segunda minoría parlamentaria, el mismo lugar que el PRO reclama para sí. El nombramiento del legislador oficialista para la gestión 2022 fue cuestionado por la propia Corte que consideró que ese lugar le corresponde al senador opositor Luis Juez, diez días antes de que terminara su mandato.
Ahora se espera una nueva respuesta del Máximo Tribunal y los escenarios son diversos. Por un lado puede aceptar tomarle juramento a Doñate con la aclaración de que lo hace sabiendo que hay una causa judicial que inició Luis Juez contra esa designación y sin perjuicio de lo que pueda ocurrir en ese expediente, que lógicamente llegará a la Corte. Eso mismo resolvió el máximo tribunal cuando le tomó juramento al senador kirchnerista en abril. Juez, a través del abogado Pablo Manili, presentó el viernes un amparo en el que solicitó que se declare nula la designación de Doñate en el Consejo y que no pueda asumir.
Otra posibilidad es que la Corte, sin esperar a como avance la causa judicial que inició Juez, resuelva si Doñate puede asumir o no en base a su propio fallo del 8 de noviembre. Por lo pronto, ante el conflicto en cuestión, el Máximo Tribunal estableció un acuerdo especial para mañana, a fin de analizar el caso.
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